Publicado el 2023-02-06 en Deportes

Un festival que revoluciona los métodos de enseñanza

Por: L.R.C.I. Sergio Daniel Mendoza Maya, entrenador de Esports en la UNLA

 

La madurez del hombre es haber vuelto a encontrar 
la seriedad con la que jugaba cuando era niño. 

-Friedrich Nietzsche

 

Los festivales son eventos que nos emocionan y nos proporcionan una oportunidad de crear bonitos recuerdos acompañados de nuestros seres queridos. Estos son parte importante de la vida cultural del ser humano desde 4500 a.C. con los egipcios, griegos y romanos. Aunque en lo personal mis favoritos son los festivales japoneses, en especial, con los tradicionales festivales de verano donde acaban con el clásico espectáculo de fuegos artificiales.

 

No obstante, no vayamos tan lejos, en nuestra querida Morelia tenemos algunos eventos tradicionales. Como el ahora renombrado popularmente Caña Fest, donde llegan puestos de diferentes ciudades a hacer la vendimia de un variado número de artículos y tentempiés. Entre ellos, las más famosas cañas, así como gorditas, pizzas, y demás botana que no acabarías de probar en una sola noche. También se encuentran puestos de ropa y accesorios, pero también relevante, sin duda alguna, son los puestos de juegos.

 

Juegos de precisión milimétrica que solo los más capaces se sacan el tan esperado peluche. Como el clásico tirar la canica para acumular puntos según el hueco donde se atore al regresar, o los puestos de encestar los balones, así como el de tronar los globos con dardos e inclusive los de tumbar una columna de figuritas con un arma de balines. Juegos que te retan e inflan el pecho si sales victorioso, claro está.

 

 

Una posible mayoría de la población tratará a estos juegos como un simple entretenimiento o como la gente más exigente y ofuscada por la vida denomina a estas actividades lúdicas como una pérdida de tiempo. Sin embargo, no hay que subestimar la utilidad y el bien que hace jugar para el desarrollo de cualquier ser humano, y que no está limitado únicamente para la infancia. No hay mayor aprendizaje que en el juego, por esta razón los niños aprenden más jugando y por ello hay que hacer un buen uso de los juegos.

 

En una época donde es posible que aprendas más de un videotutorial de YouTube de 15 minutos que dos horas de clase, esta debería ser suficiente alarma para empezar a buscar nuevas alternativas o formas de enseñanza, especialmente para jóvenes de 15 a 25 años. Que es el rango de edad los cuales están inmersos en la cultura electrónica, redes sociales, internet, juegos digitales, transmisiones y compras en línea. Donde tienes todo al alcance de tu mano, pues con la aplicación correcta puedes comprar una pizza en un puesto local hasta una cafetera profesional italiana sin salir de tu casa y con entrega a domicilio.

 

El paradigma social latinoamericano al respecto de los juegos necesita cambiar, para permitir reinventar la manera en que los jóvenes aprenden. Concientizar en el uso de redes sociales y práctica de juegos de video, en vez de rechazarlo. Se necesita tener una mayor inclusión e importancia, para sacar su máximo potencial y ayudar en el desarrollo de las nuevas generaciones en vez de su detrimento. Ya es inevitable no contar con un correo electrónico, una red social, o un celular. Debemos aceptar estos cambios y usarlos a favor de los jóvenes, no con desprecio, mirándolos hacia abajo solo porque para divertirse graban videos de tiktoks, en vez de hacer algo de provecho. Porque es un simple discurso repetido de generación en generación, satanizando lo nuevo, el rock en su momento, las series japonesas, o una forma diferente de vestir.