Escrito por: Coach Silvia Paola Alvarado, entrenadora del equipo representativo de Animación y Baile UNLA
Para mí, Representar a la Universidad Latina de América (UNLA) a través del equipo representativo de Animación y Baile ha sido, sin duda, una de las experiencias más significativas de mi trayectoria como entrenadora. Durante los días 10 y 11 de abril de 2025, tuvimos la oportunidad de participar en el “Campeonato Nacional Colegial de Animación y Baile”, organizado en el Centro Cultural Mexiquense de la Universidad Anáhuac Campus Norte, en la Ciudad de México.
Este viaje no solo nos dejó trofeos: segundo lugar nacional en la categoría Dance Pom y Campeón nacional en Quinteta Cheer, sino una profunda reflexión sobre lo que implica el esfuerzo conjunto, la constancia, y el poder del trabajo en equipo.
Como coach, el acompañar a jóvenes estudiantes de preparatoria y universidad en este tipo de procesos implica mucho más que entrenamiento físico. Supone planificación, gestión emocional, motivación constante y sobre todo, una formación integral. El equipo vivió meses de preparación rigurosa, compatibilizando los compromisos académicos con las exigencias del alto rendimiento deportivo.
El camino no fue fácil: lidiamos con lesiones, limitaciones logísticas, jornadas extendidas y momentos de duda. Sin embargo, todo desafío fue superado con determinación y confianza en un objetivo común: representar a nuestra institución con orgullo y excelencia.
Estas competencias no solo miden talento técnico, sino también la capacidad de liderazgo, la empatía entre compañeras y compañeros, la disciplina mental y el compromiso con los valores institucionales. Como entrenadora, he sido testigo del crecimiento personal y colectivo de este equipo. Lo que más me llena de orgullo no son únicamente los resultados, sino la manera en que cada integrante de este grupo se mantuvo firme, apoyándose mutuamente hasta el último segundo.
Competencias como esta también cumplen un papel fundamental en la formación integral que impulsa la UNLA. Desde la perspectiva académica y formativa, estos espacios fomentan habilidades clave para el desarrollo profesional: liderazgo, resolución de problemas, colaboración y manejo del estrés. Además, permiten que los estudiantes vivan experiencias que amplían su visión del mundo y refuerzan su sentido de identidad como parte de una comunidad educativa que los apoya y respalda.
Agradezco a Deportes UNLA por la confianza depositada en mí, por apoyar estos espacios de expresión y excelencia, y a las familias de las y los estudiantes por su acompañamiento incondicional. ¡El triunfo fue de todos!.
Hoy miro hacia el futuro con entusiasmo, sabiendo que este logro es solo el inicio de un nuevo nivel de exigencia, creatividad y compromiso. Seguiremos representando a la Universidad Latina de América con el corazón en alto, haciendo de cada competencia una oportunidad de transformación.
