Por Irving Rodríguez
Han sido años difíciles no solo para México, sino también para el mundo entero, debido a fenómenos que no esperábamos, que ni siquiera imaginábamos. De hecho, creíamos y depositábamos nuestras esperanzas en una situación más próspera, en la visión de un país mejor, con un mayor rango de oportunidad y flujo de dinero.
Incorporación de realidad mixta (CNET, 2022).
México es, por naturaleza, un país manufacturero industrial, y uno de sus pilares más importantes es la rama automotriz. El sector manufacturero industrial representa un 17% del PIB de la nación, de este porcentaje, 3% pertenece a la industria automotriz.
Gráfica 1. Participación del PIB mexicano en la industria automotriz. Elaboración propia con base en datos de INEGI (2022).
En la Gráfica 1, se puede observar que en 2020 y 2021 tuvimos un retroceso que igualó los números de 2014 y 2015. Para 2024, se espera retomar el incremento prepandémico, de acuerdo con la publicación «Retos de la Industria Automotriz frente al 2022» (2022) del doctor José Zozaya, lo cual implica un mayor compromiso para los asociados y aliados de la industria.
Gráfica 2. Ventas de vehículos comerciales 2019-2020. Elaboración propia con base en información de International Organization of Motor Vehicle Manufacturers (2021).
Este decremento en el PIB automotriz se atribuye a una escasez de chips, no hay producto que vender por parte de las concesionarias, pero ¿el problema realmente es la escasez de chips? Según la Asociación de la Industria en Semiconductores (por sus siglas en inglés, SIA), en 2021 se registró el mayor incremento en la historia por un 26.2%, lo que representa ventas de 559.9 millones de dólares, mientras que en 2020 se identificó un total de 440.4 millones de dólares. Para 2021, el total de unidades de semiconductores embardadas fue de 1.15 trillones de unidades. Estas unidades son de tipo análogo, lógicas y de memoria, son usadas principalmente en los vehículos, computadoras, discos duros, celulares y otros consumos como domótica o robótica.
¿Por qué se dio dicho incremento? La pandemia normalizó diferentes palabras en nuestro vocabulario diario, como teletrabajo, modelo híbrido, modelo a distancia, capacidad virtual, distanciamiento social, etc. La situación equipó a escuelas para tomar clases a distancia, lo cual implicó la compra de tabletas o smartphones por parte de estudiantes y docentes, la habilitación de áreas de trabajo en casa gracias a computadoras, impresoras, monitores; e incluso dispositivos de realidad aumentada: HoloLens, Real Wear, Oculus; en universidades y empresas. Dichos dispositivos, además de crear espacios virtuales que parecen sacados de un videojuego, facilitan el crecimiento educacional y el seguimiento de actividades presenciales, es decir, casi implican estar ahí desde la comodidad de tu casa.
Imaginémonos a un cirujano que está realizando una operación a corazón abierto, y quiere consultar a uno de sus colegas más experimentados en plena cirugía, por lo que se coloca los lentes de realidad aumentada y comienza a transmitir en vivo, para que la otra persona lo guíe y pueda instruirlo mientras el cirujano tiene las manos libres a fin de realizar el procedimiento. Lo anterior significaría un gran avance dentro del campo de la salud, pues permite mejorar la eficiencia y eficacia de una operación en términos de confianza, conectividad, tiempo y distancia.
Procedimiento de artroplastia (FDA, 2021).
Estos dispositivos tienen la misma productividad en la industria automotriz, al momento de visualizar prototipos de vehículos, realizar entrenamientos a los empleados o cualquier tipo de visita a plantas manufactureras o proveedores. Las innovaciones asistidas de electrónicos y desarrolladas durante la pandemia provocaron la escasez de semiconductores, y la demanda superó la oferta actual del mercado. ¿Hubo un retroceso o más bien… un avance?
Este fenómeno se dio a nivel mundial. No solo los autos aumentaron de precio, sino también los celulares, computadoras, tabletas, relojes inteligentes, etc. Ahora, se tiene una nueva cultura, ideología y pensamiento, una mayor apertura a las innovaciones de la industria 4.0 que anteriormente no se consideraban.
Referencias
Ackerman, D. (05 de abril de 2022). «Satya Nadella talks up mixed reality for IT». CNET. Recuperado de https://www.cnet.com/tech/computing/satya-nadella-talks-up-mixed-reality/
CBS. (8 de septiembre de 2021). «Chip shortage likely to keep car prices sky-high through 2023». Recuperado de https://www.cbsnews.com/news/chip-shortage-car-prices-sky-high-through-2023/
Cervantes, P. (18 de noviembre de 2021). «Prevén que 29% de los vehículos vendidos en 2035 sean eléctricos, lejos de la meta para 2040». Forbes México. Recuperado de https://www.forbes.com.mx/preven-que-29-de-los-vehiculos-vendidos-en-2035-sean-electricos-lejos-de-la-meta-para-2040/
IOICA (17 de septiembre de 2021). International Organization of Motor Vehicle Manufacturers. 2020 Production Statistics. Recuperado de https://www.oica.net/category/production-statistics/2020-statistics/
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Sprigg, S. (05 de abril de 2021). «Surgical Planning Associates receives FDA clearance for its HipInsight Augmented Reality system for joint arthroplasty». Auganix. Recuperado de https://www.auganix.org/surgical-planning-associates-receives-fda-clearance-for-its-hipinsight-augmented-reality-system-for-joint-arthroplasty/
Zozaya, J. (06 de enero de 2022). «Retos de la Industria Automotriz frente al 2022». Forbes México. Recuperado de https://www.forbes.com.mx/retos-de-la-industria-automotriz-frente-al-2022/
